Liceo Mixto de Los Andes venció por 95-85 a Universidad de Concepción en un dramático quinto partido del play-offs final y logró una ventaja de 4-1 inalcanzable en la serie para adjudicarse por primera vez en su historia el título de la Dimayor.
Tras un traspié sufrido el año pasado ante Provincial Osorno en la etapa decisiva, los dirigidos por Pablo Ares brindaron una maciza actuación en el Gimnasio de San Felipe y ahuyentaron todos los fantasmas parta hacerse acreedores del trofeo de vencedores.
En una final de dientes apretados fue el conjunto local quien asumió el protagonismo desde los primeros minutos, mientras la escuadra penquista naufragaba por la carencia de conducción y el bajo rendimiento de sus refuerzos extranjeros.
Por el contrario, los norteamericanos Terrence Hill y Keith Madison de Liceo Mixto justificaron la inversión, muy a la inversa de Alain Laroche y Chris Sockwell, quienes no lograron evitar el asedio andino en el tablero.
Una diferencia de 13 puntos en el entretiempo demostró que la falta de mayor acierto y coordinación en el conjunto penquista fue un pecado que pagó caro en toda la serie decisiva.
En el tercer cuarto la historia varió un poco, ya que el quinteto liceano se relajó en la marca, cometieron algunos errores defensivos y ofensivos, lo cual permitió a los universitarios descontar a seis puntos de diferencia.
Sin embargo, en una cardiaca cuarta parte los aspirantes a campeones supieron administrar la ventaja y jugaron con el nerviosismo y la frustración de sus rivales, que protagonizaron un bochornoso incidente con el equipo de televisión que transmitía el encuentro.
La pelea fue sólo una mancha que poco empañó el gran trabajo de Liceo Mixto, que esperó pacientemente el fin de la brega para desatar las celebraciones de un título a nivel nacional con ribetes históricos y que le permitirán proyectarse a dar un salto internacional con mayor peso y jerarquía.
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